Brote de casa
Mi amiga Meli me escribe preguntándome si le haría un cuadro. Muy halagada, le respondo que sí. Me dice que es para su "nueva" casa. En realidad, casa de sus abuelxs, en donde ella también vivió. La casa estuvo alquilada y ahora Meli vuelve a habitarla. En el parque del fondo solía haber un ciruelo, que se terminó pudriendo por la ansiedad de las cotorras que andan por el barrio. Con su hijo y su compañero plantaron un limonero en el lugar.
Pasé los últimos días concentrada en traducir ese relato y acá les comparto un poquito del proceso.
Contar historias no solo con la escritura me hace feliz.
